El joven de Villa Ventana obtuvo su cuarto nacional consecutivo en octatlón. “El domingo me sentí increíble. En lo mental estaba perfecto” aseguró.
El pasado fin de semana en la ciudad de Córdoba se llevó adelante un nuevo Campeonato Nacional de Octatlón, en donde el representante de Villa Ventana, Tomás Trivellini, volvió a subirse a lo más alto del podio.
Con la emoción aún a flor de piel, el joven repasó al detalle lo ocurrido, comenzando por señalar que “la competencia fue al lado del estadio Kempes. Nosotros paramos en Villa Carlos Paz”.
Segmentando las vivencias por días, “el sábado se compitió en 80 metros, salto en largo, bala y salto en alto. Los 80 metros no son mi fuerte, pero igual mejoré marca, lo mismo que en salto en largo. El clima es pesado, húmedo… encima hizo calor así que para competir fue terrible”.
Dando un panorama de la cantidad de horas transcurridas, Tomás especificó que “empecé compitiendo a las 10 de la mañana, entrando en calor una hora antes, hasta las 4 de la tarde. Esto el primer día. El domingo empezamos más o menos a la misma hora. Me sentía muy bien”.
En esa jornada final “inicié con vallas, de ahí directamente a salto con garrocha, que es una prueba en la que me destaco. Hice una marca de 3.20, mejorando muchísimo la técnica. Tuvimos jabalina, mejorando mi marca…”
Dando detalles complementarios, Trivellini mencionó que “éramos cinco competidores. En principio estaban anotados siete, pero no sé porque faltaron los otros dos. Es realmente una prueba demandante, que requiere mucha cabeza. Tenes que estar concentrado, una a la vez, pero te obliga a haberlas practicado a todas. Al mismo tiempo tenes que tener las instalaciones, los elementos y los instructores”.
Por último, reconoció que “mucha veces lo que pasa en octatlon es que es complicado entrenar todas las pruebas de manera pareja. Muchas veces elijen a qué hacer foco. La idea es tener todo parejo. Así que lo que buscamos es mejorar donde estoy flojo”.