La Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) respondió afirmativamente a un pedido de la Defensoría del Pueblo de la Nación, ante la grave vulneración de derechos que sufrió un chico con discapacidad, al que se le negó el ingreso un hotel en Tucumán y a un centro comercial en Jujuy, por estar acompañado por un perro guía o de asistencia.
La ANDIS manifestó que el caso, “va a tener el tratamiento en el marco del Comité Técnico respectivo, con el objeto de articular acciones que promuevan el cumplimiento efectivo de la Ley 26.858, y asegurar el derecho de acceso, deambulación y permanencia a lugares públicos y privados de acceso público y a los servicios de transporte público, en sus diversas modalidades, de toda persona con discapacidad acompañada por un perro guía o de asistencia, sin perjuicio de la potestad sancionatoria conferida por la Ley 26.858, por medio de la participación del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI)”.
Asimismo, la ANDIS reafirmó que “desde el ámbito correspondiente se impulsarán medidas complementarias tendientes a difundir buenas prácticas y/o recomendaciones en armonía con la normativa imperante, con el fin de promover el cumplimiento efectivo a la mencionada Ley 26.858 y evitar situaciones como la identificada anteriormente”.
El pasado 24 de julio, la Asociación Civil Bocalán Argentina denunció -a través de sus redes sociales- la situación vivida por Julián, un menor con discapacidad, usuario de un perro de asistencia. Al momento de hospedarse en un hotel de San Miguel de Tucumán, se le negó el ingreso al menor y su familia por estar acompañados del perro guía del niño, aun cuando la familia contaba con toda la documentación exigida por la Ley Nacional N° 26.858.
Igual situación vivieron Julián y su familia al intentar ingresar, el pasado 26 de julio, a un centro comercial en San Salvador de Jujuy, cuando un guardia de seguridad les impidió el ingreso con el perro guía.
Cabe destacar que la negativa a hospedarse en el hotel como el ingreso al centro comercial, no solo resultaron un incumplimiento a la Ley 26.858 sino que también vulneraron las disposiciones de la Convención sobre los Derechos para las Personas con Discapacidad y la Convención sobre los Derechos de los Niños, ambas incorporadas a nuestra Constitución Nacional.
Así es que, en el marco del Programa sobre Empresas y Derechos Humanos la Defensoría del Pueblo de la Nación dio intervención a la Agencia Nacional de Discapacidad para que disponga medidas para que, en lo sucesivo, no se vulneren los derechos de otras personas con discapacidad que utilicen un perro guía tal como le sucedió a Julián.
