Es por las últimas modificaciones al Código Aeronáutico, que cambiaron límites de servicio y las vacaciones para las tripulaciones
Luego de la reforma del Código Aeronáutico, que modifica los límites de servicio y descanso para tripulaciones aéreas, el gremio de pilotos advirtió por posibles cancelaciones de vuelos en julio, momento en que se desarrollarán las vacaciones de invierno y en las que se prevé una alta demanda para las aerolíneas. Indican que hay dificultades en la reconfiguración de las operaciones con el nuevo régimen.
El conflicto se origina en la reglamentación del Decreto 378/2025, publicado en el Boletín Oficial a principios de junio. Este, entre otras cuestiones, establece que el descanso semanal baja de 36 a 30 horas de las tripulaciones y aumenta a 1.000 horas máximas de vuelo anuales (previamente eran 800).
Además, reduce las vacaciones, ya que todo piloto nuevo tenía por ley 30 días corridos de descanso, que se sumaban a otros 15 días legales, totalizando 45 días al año. Con la nueva normativa, se unificó el criterio y se establecen 15 días consecutivos de vacaciones anuales, sin sumatorias automáticas. De esta manera, se iguala con los estándares internacionales. En EEUU, por ejemplo, un piloto nuevo tiene 14 días al año.
En ese marco, la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) comunicó: “A esta altura del mes de junio, las programaciones de vuelo de varias flotas y empresas aerocomerciales para el mes de julio aún no están disponibles. Este retraso se debe, en gran medida, al dictado del Decreto 378/25, una norma inconsulta, ilegítima e ilegal, como ha venido declarando APLA y así lo requerirá judicialmente”.

“Las empresas no saben a qué ajustar sus sistemas de programación y realizar las configuraciones necesarias en sus aeronaves para cumplir con una normativa como la indicada. Una vez más, la Subsecretaría de Transporte Aéreo demuestra su falta de planificación al implementar una nueva regulación que no puede tener aplicación y que, en su caso, tendría un considerable impacto en las operaciones aéreas durante la alta demanda de las vacaciones de invierno”, señalan.
“La falta de previsibilidad dará lugar a cientos de cancelaciones de vuelos durante el período vacacional invernal. Desde APLA, hacemos responsables a las autoridades gubernamentales que intentan con este decreto alterar el régimen aeronáutico y ello podría determinar las consecuencias mencionadas anteriormente”, agregan.
Cabe recordar que el gremio le había enviado carta documento a todos los CEOs y directores de las empresas y organismos que representa, intimando a que se abstengan de implementar cualquier modificación del decreto, “bajo apercibimiento de hacerlos responsables, personal, civil y penalmente, de cualquier situación que se derive de ello y afecte la seguridad operacional”.
Para el Gobierno, “la medida tendrá un impacto favorable para cualquier línea aérea que quiera operar en la República Argentina y pone al sector al servicio de los argentinos. Permite que los operadores aerocomerciales cuenten con más libertades para organizar la operación beneficiando a empresas y pasajeros que contarán con una mayor competitividad y más opciones de vuelo; siempre priorizando la seguridad operacional del sistema”.
En este escenario de tensiones, APLA ya había realizado un paro total deactividades el martes 10 de junio. La medida afectó las operaciones de Aerolíneas Argentinas en los aeropuertos Jorge Newbery (Aeroparque) y Ministro Pistarini (Ezeiza).
Entre los motivos que impulsaron la medida, el sindicato enumeró las “inaceptables incumplimientos convencionales perpetrados por la empresa”, junto con un “prolongado retraso en la pauta salarial”, la “falta de un plan de desarrollo profesional” y la “ausencia de una estrategia clara y sostenible para el futuro de la compañía”.
“La pauta salarial nunca se terminó de ajustar”, reclamaron. En ese sentido, explicaron que se han producido ajustes parciales que, en su mayoría, quedaron por debajo de la inflación. “Ahora no logramos que haya una nueva propuesta”, indicaron.
La medida afectó los planes de viaje de más de 6 mil pasajeros con vuelos programados en esa franja horaria. La empresa enfrentó una pérdida estimada en 1,1 millones de dólares entre daños directos e indirectos derivados de esta acción.
Fuente Infobae