“Arden fogatas de emancipación femenina, venciendo rancios prejuicios y dejando de implorar sus derechos. Y si no lo escriben en mármol, que lo graben en el viento, en las paredes, en las venas de cada mujer que vota sin pedir permiso. La mujer debe luchar para conseguir la realización de sus derechos, éstos no se mendigan, se conquistan».
JULIETA LANTERI, que había nacido en un pueblo del Piamonte italiano el 22 de marzo de 1873, se convirtió en la primera mujer incorporada al padrón electoral, la primera mujer que votó en la Argentina, el 26 de noviembre de 1911
Votó cuarenta años antes de que Eva Perón proclamara el voto femenino en 1947. Fundó un partido político antes de que las mujeres pudieran votar. Organizó congresos, apoyó huelgas, construyó sindicatos, se enfrentó al régimen conservador de la época y lo desafió.
No abogaba exclusivamente por el derecho al voto. Su lucha incluía denunciar las condiciones inhumanas de las obreras privadas de cualquier derecho, pelear contra proxenetas y funcionarios que se enriquecían con la explotación sexual, exigir el derecho al divorcio, terminar con el poder de la Iglesia sobre la vida de las personas. Julieta Lanteri nunca aceptó que los derechos fueran solo para algunas mujeres, perseguía la igualdad de derechos en todos los planos, político, legal, laboral y civil.