La Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal revocó una resolución de primera instancia que había avalado la reserva total de los datos y obliga a la autoridad monetaria a detallar —o justificar de manera precisa por qué no puede hacerlo— el destino de esos activos estratégicos. Para el tribunal, la negativa del Central a brindar los datos pedidos vulneró principios básicos de transparencia y máxima divulgación que rigen el derecho de acceso a la información pública.
La Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal ordenó en las últimas horas al Banco Central de la República Argentina (BCRA) informar qué ocurrió con los lingotes de oro que fueron trasladados al exterior durante 2024. El fallo revoca una resolución de primera instancia que había avalado la reserva total de los datos y obliga a la autoridad monetaria a detallar —o justificar de manera precisa por qué no puede hacerlo— el destino de esos activos estratégicos.
La resolución, firmada por los jueces Guillermo Treacy y Pablo Gallegos Fedriani, sostiene que la respuesta del BCRA se basó en “meras afirmaciones genéricas” y que no logró demostrar de qué modo la divulgación de la información podría poner en riesgo la estabilidad financiera del país. Para el tribunal, la negativa vulneró principios básicos de transparencia y máxima divulgación que rigen el derecho de acceso a la información pública.
Para los jueces, se trata de “un asunto de indudable interés público”, como es la administración de las reservas internacionales, y “la configuración de alguna de las excepciones legales a la entrega de información pública no puede depender de una apreciación unilateral del sujeto obligado”, al tempo que destacó el Estado está obligado a demostrar, “de manera concreta, que la difusión de los datos solicitados causaría un daño a un interés legítimamente protegido”.
Además, el tribunal hizo hincapié en que el Banco Central no explicó “por qué no podría informar si existieron las operaciones de envío de lingotes de oro al exterior y el monto involucrado, el ámbito en que se adoptó la decisión, la existencia de expedientes administrativos o la eventual notificación a la sindicatura”.
En su momento, el BCRA se negó a dar a conocer los informes solicitados ya que, considera, que de esa manera sepodría “exponer la ubicación geográfica de los activos y comprometer la seguridad de las reservas internacionales”, además de poner en riesgo la política cambiaria y la estabilidad del sistema bancario.
Un reclamo que escaló en los tribunales
El caso se originó a partir de pedidos formales de la Asociación Bancaria, que en 2024 solicitó conocer detalles sobre eventuales envíos de lingotes al exterior: montos, fechas, decisiones administrativas, funcionarios intervinientes, costos logísticos y destino final. La entidad sindical argumentó que la falta de información impedía ejercer un control ciudadano sobre decisiones que afectan la política monetaria y la administración de las reservas internacionales.
El Banco Central rechazó esos pedidos y declaró la “reserva total” de la documentación, amparándose en excepciones previstas en la Ley 27.275. Según la autoridad monetaria, revelar esos datos podría comprometer la seguridad de los activos y la estabilidad del sistema financiero. La Cámara consideró insuficiente esa fundamentación y recordó que las excepciones deben interpretarse de manera restrictiva y siempre con una justificación concreta.
Qué había pedido Sergio Palazzo
El diputado nacional de Unión por la Patria Sergio Palazzo presentó en julio pasado un pedido de acceso a la información pública para que el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, conteste “las versiones relativas a la salida de oro de las reservas” del organismo “con destino al exterior”.
“Ante versiones circulantes relativas a la salida de oro de las reservas del BCRA con destino al exterior, acompaño el pedido de información pública, clara, precisa, completa y detallada, efectuada al presidente del BCRA de acuerdo al derecho que me confiere la Ley de Acceso a la Información Pública 27.275 y su decreto reglamentario N° 206/2017”, escribió el titular de la Asociación Bancaria en sus redes sociales.
El gremialista reclamó conocer si “existen operaciones de envío de lingotes de oro al exterior durante el mes de junio”. Según sostuvo Palazzo, “el 7/06/2024 hubo una partida y el 28/06 hubo otra”.
En este sentido, exigió conocer “qué cantidad, por qué monto y en qué moneda se ha realizado, bajo qué características comerciales o de otra índole, a qué destino y si la operación se realizó con la transportadora Lumil y enviados por la aerolínea British Airways”.
También reclamó información sobre si está previsto un nuevo envío de lingotes de oro y, en caso que así fuese, cuál es el objetivo. A su vez, el sindicalista solicitó saber si se han encomendado a agentes internos y/o externos “alguna acción con respecto al traslado y destino de los lingos de oro y todo tipo de activos”. “Además, que se indique la reunión del Directorio, Comisión o Comité en que se trató dicha cuestión”, completó Palazzo.
En aquel momento, el entonces vocero presidencial y ahora jefe de Gabinete, Manuel Adorni, consideró que el diputado kirchnerista “hace futurología” al anticiparse sobre determinadas variables del mercado cambiario.
“Es difícil de entender cuál es el sustento de lo que dice Palazzo. La verdad que hace futurología porque me parece extraño que sepa cómo se va a desenvolver el mercado cambiario en virtud de las últimas medidas”, indicó el funcionario en declaraciones periodísticas.
“Entenderá Palazzo que si efectivamente hemos tomado estas medidas es para seguir en el camino correcto y no para que el BCRA se quede sin reservas”, siguió el exportavoz presidencial.
“De hecho, tiene un objetivo claro esta medida en términos cuantitativos. No entiendo a qué se refiere. Si amplía la base del sustento de lo que tiene para decir eso, lo discutimos, así es difícil debatir sobre algo abstracto”, finalizó Adorni.
Transparencia, reservas y un debate que se reabre
El nuevo fallo vuelve a poner en el centro de la escena la administración de las reservas internacionales, un tema históricamente sensible para la política económica argentina. Según trascendidos citados en expedientes y notas periodísticas, parte del oro habría sido trasladado a cuentas en el exterior —incluso en Londres— para obtener rendimientos o utilizarse como garantía en operaciones financieras, aunque nunca se informó oficialmente el detalle de esas maniobras.
La Justicia ahora exige que el Banco Central entregue la información solicitada o explique, punto por punto, por qué cada dato específico podría generar un daño concreto. No alcanza, según el tribunal, con invocar riesgos hipotéticos o genéricos.
Qué puede pasar ahora
La resolución obliga al BCRA a responder y abre un escenario institucional complejo: si la entidad insiste en mantener la reserva, deberá justificarlo con argumentos sólidos y verificables. Si entrega la información, se conocerán por primera vez detalles sobre una operación que el propio Gobierno había mantenido bajo estricta confidencialidad.
El fallo también sienta un precedente relevante para futuros pedidos de acceso a la información vinculados a la política económica y al manejo de activos estratégicos del Estado.
La postura de la AGN
El presidente de la Auditoría General de la Nación (AGN), Juan Manuel Olmos, reveló en septiembre pasado que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) restringió el intercambio de información sobre los lingotes de oro girados al exterior y que no se puede determinar “dónde están”.
“El proceso de intercambio de notas se ha agotado. Ha motivado la negativa del BCRA, en la forma que establece la AGN, a dar la información necesaria para realizar esa auditoría. Nos hemos detenido. No podemos saber dónde está específicamente el oro”, dijo en aquel momento Olmos, en su presentación ante la Comisión Bicameral Revisora de Cuentas Mixta.
El funcionario también aclaró que tampoco saben en la AGN qué “interés está rindiendo” ese oro y acotó que resulta “fundamental saber cuáles son las tasas”.
“Tampoco sabemos si se han pagados seguros de traslados. Estamos en un momento donde lo que necesitamos es avanzar”, agregó ante la comisión.
Sobre el final, el titular de la AGN propuso que la Comisión considere la citación a las autoridades del BCRA o “lo que disponga”.
Olmos se quejó también por las demoras en la puesta en marcha del Colegio de Auditores, acéfalo desde hace meses:, al afirmar que “si estuviera constituido el colegio de auditorias, podría judicializar el tema”.
También hizo hincapié en los bonos BOPREAL e indicó que el Banco Central respondió con la misma dinámica que ante las consultas por los lingotes de oro. “Tampoco podemos terminar de concluir esa auditoría, el BCRA nos dice esa información es reservada”, aseveró.
Para Olmos, exfuncionario de Alberto Fernández y referente del PJ porteño, “ese secreto es importante para el desarrollo funcional e institucional del Banco, pero no para el organismo auditor”. “En todo caso, es un ejemplo de reserva que debería haber”, cerró.
Fuente elDiarioAR




































































