El largometraje es una propuesta de OpenAI, la empresa detrás de herramientas como ChatGPT y DALL-E.
Critterz contará la historia de unas misteriosas criaturas que viven tranquilamente en el bosque hasta que un extraño asalta su aldea, desencadenando una serie de eventos que las llevarán a embarcarse en una nueva aventura. Las primeras imágenes de los personajes ya se han compartido en redes sociales.
Un cortometraje de DALL-E
En un primer momento, Critterz empezó con la idea de convertirse en cortometraje. Chad Nelson, especialista creativo de OpenAI y creador del filme, comenzó a crear los personajes hace ya tres años mientras probaba la herramienta de generación de imágenes DALL-E, que en aquel momento su compañía acababa de lanzar.
Pero la idea no se quedó ahí y Nelson ha seguido trabajando en aquellos primeros bocetos. Ahora se ha aliado con otras compañías cinematográficas para seguir desarrollando lo que finalmente será un largometraje. La idea es que este se estrene en el Festival de Cannes de 2026 y de ahí pase directamente a la cartelera de las salas de cine.
El equipo pretende realizar la película en unos nueve meses, según ha revelado James Richardson, cofundador de la productora Vertigo Films, a The Wall Street Journal. Este proceso ya ha empezado: el guion está escrito, pero todavía tienen que decidir quién formará el reparto que pondrá las voces a los personajes.
Una de las cosas que más ha llamado la atención es que la producción tendrá un presupuesto inferior a 30 millones de dólares. Se trata de una cifra sorprendentemente baja si la comparamos con algunas de las últimas películas de animación. Por ejemplo, se estima que el presupuesto de Elio, la última película de Disney-Pixar, rondó los 150 millones de dólares.
Problemas de derechos de autor
El anuncio de la película ha vuelto a reabrir el debate sobre los problemas que pueden acarrear este tipo de producciones desde el punto de vista de los derechos de autor. Diferentes empresas, así como trabajadores (guionistas y actores principalmente), han mostrado su rechazo a la utilización de la IA en la creación de obras audiovisuales.
Las demandas en este sentido empiezan a llegar. En junio, Disney y Universal demandaron al generador de imágenes por IA Midjourney por presuntamente copiar sus propiedades protegidas por derechos de autor. Aunque Midjourney ha impugnado estas acusaciones, no ha sido capaz de frenar las denuncias. A principios de septiembre fue el turno de Warner Bros. Discovery, que también presentó una demanda similar contra la compañía.
Laura Cuesta – elDiarioAr