El Balneario La Hoya de Sierra de la Ventana se convirtió en el escenario de una jornada de música, feria y gran participación comunitaria, organizada para recaudar fondos y donaciones para la Escuela Especial 502 de la localidad. Darío Romero, concesionario del balneario y uno de los organizadores de la iniciativa, celebró el éxito de la convocatoria: “El día estuvo espectacular, no pudo haber salido más perfecto. Hubo bastante concurrencia”.
El evento, impulsado por un grupo de unos 20 vecinos organizados, combinó bandas de rock y folklore, puestos de artesanos, feria de ropa y gastronomía, logrando recaudar $100.000 y donaciones en elementos deportivos. La acción solidaria surgió ante la necesidad de cubrir faltantes en el área de Educación Física de la escuela (como pelotas, conos y kits de entrenamiento), necesidades que no pueden ser solventadas por el Consejo Escolar debido a recortes presupuestarios. Romero agradeció que «cada vecino de la comunidad haya puesto su granito de arena» y concluyó que estas acciones son «parte de algo bueno que se hace en el pueblo».
Con una jornada llena de música, feria y participación vecinal, se realizó un evento solidario para colaborar con la Escuela Especial 502 de Saldungaray. La iniciativa fue impulsada por un grupo de vecinos que se organizó para cubrir necesidades educativas que no pueden ser solventadas por el Consejo Escolar.
“El día estuvo espectacular, no pudo haber salido más perfecto. Hubo bastante concurrencia”, expresó Dario Romero, uno de los organizadores del evento, que reunió a artistas, bandas de rock y folklore, puestos de artesanos, feria de ropa, cerveza artesanal y choripanes. La propuesta combinó cultura y solidaridad, con el objetivo de apoyar a la institución educativa local.
“Somos una comunidad organizada de unos 20 vecinos que nos juntamos a conversar, planificar eventos, y ahora salió el tema de eventos solidarios”, explicó Darío, destacando el espíritu colaborativo que dio origen a la jornada. La idea de colaborar con la Escuela Especial surgió ante la necesidad de cubrir faltantes en el área de Educación Física, como pelotas, conos y kits de entrenamiento, que no pueden ser cubiertos por el Consejo Escolar debido a recortes presupuestarios.
El resultado fue más que positivo: “Juntamos $100.000 y donaciones; pelotas de básquet, conos, kit de entrenamiento y pelotas de handball. La verdad agradezco que cada vecino de la comunidad haya puesto su granito de arena”, comentó Dario. Actualmente, el grupo se encuentra buscando elementos deportivos vía internet, guiados por las necesidades específicas que plantea la institución.
“Estas acciones son parte de algo bueno que se hace en el pueblo”, concluyó, celebrando el impacto colectivo de una jornada que unió música, compromiso y comunidad.


































































