Según el último informe del INDEC, la salida de turistas residentes creció un 15,3%, mientras que la llegada de visitantes extranjeros retrocedió un 2,7%. Esta brecha generó un déficit de 224 mil turistas en el mes, profundizando la presión sobre la salida de divisas por el rubro servicios.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) reveló este martes cifras preocupantes para la balanza turística nacional correspondientes al mes de noviembre. Durante este periodo, ingresaron a la Argentina 491.400 turistas extranjeros, una cifra que marca un descenso interanual del 2,7%. En contraste, los residentes que optaron por viajar al exterior sumaron 763.800 personas, lo que representa un salto del 15,3% respecto al año anterior.
Turismo Receptivo: De dónde vienen y por qué vía
Del total de visitantes no residentes, el informe destaca que 491,4 mil fueron turistas (quienes pernoctan) y 303,9 mil fueron excursionistas (visitas sin pernocte).
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Origen: Los principales mercados emisores hacia Argentina fueron Brasil (19%), seguido de cerca por Europa (18,7%) y Uruguay (14,4%).
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Transporte: La mayoría de los extranjeros eligió la vía aérea (52,9%), mientras que el 35,3% ingresó por vía terrestre y el 11,9% restante por vía fluvial o marítima.
Las salidas de argentinos al exterior totalizaron 1.271.400 visitantes por todas las vías internacionales. Un dato clave es la fuerte concentración en la región: el 71,8% de los turistas residentes se dirigió a países limítrofes, con Brasil (21,9%) y Chile (21,4%) como los destinos predilectos.
En cuanto a la logística de salida, el 47% de los turistas optó por el avión, un 43,3% lo hizo por tierra y un 9,7% utilizó vías fluviales o marítimas.
Déficit de divisas y saldos negativos
El balance general de noviembre arrojó un saldo negativo de 476.200 visitantes internacionales (sumando turistas y excursionistas). Al desglosar específicamente por vía aérea, el saldo fue negativo en 99.000 turistas.
Este fenómeno se explica por la aceleración de los viajes de residentes, que crecieron un 24,2% interanual solo considerando Ezeiza y Aeroparque, frente a un aumento de apenas el 5% en la llegada de extranjeros por esas mismas terminales aéreas. Esta disparidad técnica y numérica se traduce en una mayor «fuga» de divisas, ya que el gasto de los argentinos en el exterior supera con creces lo que dejan los visitantes internacionales en el mercado local.




































































