Guadalupe Fernández, pasajera afectada, relata la confusión y desesperación al descubrir que sus maletas y pertenencias no llegaron con ella.
Una situación caótica se vivió en el micro de larga distancia Nro 925 de la empresa JETMAR que llegó a Sierra de la Ventana, proveniente de Bahía Blanca. Los pasajeros, entre ellos Guadalupe Fernández, se encontraron con la desagradable sorpresa de que sus maletas y pertenencias no habían llegado con ellos.
Según Guadalupe, el chofer no les permitió subir las maletas al asiento superior, aduciendo que era por protocolo. Sin embargo, al llegar a Corrientes y D’Alsen, el chofer se bajó del micro y, según versiones contradictorias, cerró la puerta del motor o la maletera, lo que resultó en la pérdida del equipaje.
La pasajera afectada relató la confusión y desesperación que se vivió en el micro, y cuestionó la responsabilidad del chofer y la empresa de transporte. La situación sigue sin resolverse, y los pasajeros afectados esperan una respuesta y solución para recuperar sus pertenencias.
«Fue un momento de confusión total. Pensamos que podía tratarse de un error logístico, pero después nos dijeron que no sabían qué había pasado», relató una de las pasajeras afectadas, quien además debía asistir a un evento familiar y se quedó sin ropa, regalos y documentación importante.
Según trascendió, los damnificados intentaron comunicarse con representantes de la empresa, pero no habrían obtenido respuestas claras ni inmediatas sobre lo sucedido. Mientras tanto, crece el malestar entre los usuarios por la falta de controles de seguridad en el manejo del equipaje.
“Uno planea todo con anticipación, ahorra, organiza, y de repente te arruinan el viaje. Nadie se hace cargo”, expresó otro de los pasajeros afectados.
Hasta el momento, JetMar no emitió un comunicado oficial, y se desconoce si se ha iniciado alguna investigación formal por parte de las autoridades competentes. Los damnificados evalúan realizar la denuncia correspondiente ante la Policía y la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT).
El caso reabre el debate sobre la seguridad en los servicios de transporte de media y larga distancia, y sobre las responsabilidades que deben asumir las empresas frente a los bienes de sus pasajeros.
